Un juego de mamushkas
Este grupo empezó en 2017. Muy lectores, como nos prestábamos libros y esas cosas, se nos ocurrió conformar un grupo de lectura. Leímos de todo y en pandemia seguimos de manera virtual. El año pasado dejamos y este año pensamos en volver y justo nos enteramos de este proyecto del Club de Lecturas. Somos cuatro y nos reunimos, semanalmente, en mi casa.
Pedimos cuatro títulos, entre ellos Hombre en la orilla de Miguel Briante. Lo empezamos a leer en mayo y seguimos durante varias semanas porque aunque leemos cada uno en su casa, nos gusta leer juntos. Si hay algo que nos unió desde que empezamos es intercambiar los sentidos que cada uno va construyendo y yo creo que Miguel Briante es especialista para la lectura en comunidad porque siempre venimos:“¿qué le pasa a este hombre que no se entiende nada…?” Eso es lo que disfrutamos, cómo la visión de uno va enriqueciendo la visión de los otros y va ayudando a entrar al que se pelea con tal cosa y al final terminamos amando la historia que se cuenta y a Miguel Briante. Y por eso lo seguimos leyendo: la nouvelle que está al final nos está llevando tres encuentros. Nos vamos turnando al leer y en la parte final alguien dice “esta parte no la quiero leer, que la lea otro”. Escuchar leer al compañero también es algo que nos encanta y comentar y buscar y vamos para atrás y para adelante. Pensamos leer un autor por mes pero Miguel Briante que es el más chiquito –tres cuentos y una nouvelle- nos está llevando más . Nosotros antes seguíamos un autor por mes pero acá estamos prendidos, pasó el mes y seguimos con el mismo, no por obligación sino por aceptar el juego de lectura que brinda el escritor. Lo que tiene Miguel Briante de interesante es que a medida que vas avanzando integra lo anterior y hay como un juego de mamushkas y en el final se une todo, entonces nos apasiona en ese sentido.
María Laura Galaburri – “Lectores cumpas”- Villa Luro – Ciudad Autónoma de Buenos Aires