Modos de leer
A principio de agosto, mientras voy llegando a nuestras reuniones semanales, veo a través de la vidriera de la librería, un movimiento inusual. Tres personas nuevas piden lugar en el grupo. Estoy sorprendida porque por lo general cuando llega el frio fuerte hay algunas deserciones. Pero no es el caso. Y se ha armado una fiesta de recepción de las nuevas por parte del grupo. Enseguida Adriana, la organizadora del whatsapp, agrega a las recién llegadas. En ese whatsapp continúan comentarios o conversaciones sobre los textos leídos. De ese modo se integran a una zona de trabajo que ellas mismas crearon.
Venimos leyendo autoras, mujeres de distintas generaciones, países y contextos. Durante el mes armamos una cadena de lecturas, textos que se relacionaban desde una perspectiva de mujer. Así leímos El calor de las cosas, cuento de uno de los libros que pedimos, de la escritora brasileña Nelida Piñón. Leímos también cuentos de Flannery O´Connor, Claire Keegan, Liliana Hecker, Mariana Enriquez… Y pudimos ver cómo, distintas generaciones de escritoras de diversos contextos geográficos y sociales se influían a través de parentescos temáticos problematizando las pasiones ocultas o aletargadas de (por ejemplo) el mundo doméstico, el desamor, la banalidad, la doble moral, las falsas representaciones o idealizaciones de mujer, madre, hijos, esposo, familia. Las obsesiones, las trampas, los mandatos impuestos que acosan a la supuesta armonía entre las personas que conforman un grupo o una familia. Leyendo así pudimos ver el sentido de leer no solo la historia que contaban sino los diversos procedimientos del contar y los efectos que éstos provocan.
-¡Pero esta es una forma distinta de leer! – dijo María Elvira, una de las integrantes del grupo, sorprendida y entusiasmada.
Lo que hicimos en este caso fue leer -además de los cuentos- cómo influyen sobre unas escritoras otras escritoras. Esto nos mostraba a la literatura como un legado que, viajando a través de los distintos autores y tiempos, se retroalimenta y se renueva del mismo modo que lo hacen las formas de leer y los lectores.
El grupo muy activo, los libros van y vienen con reseñas y comentarios.
Graciela Falbo , del Club de lecturas “Mundos posibles” – La Plata – Pcia. de Buenos Aires
Amelia Fernández
Posted at 22:10h, 03 octubreMe encantó esta descripción de Modos de Leer; similar a mis encuentros con mis chicas de Bandada de Lecturas. Hermosa descripción