Libros en llamas
Historia de la interminable destrucción de bibliotecas
Autor:
- Lucien X. Polastron
$20.400
Sin existencias
Agregar a FavoritosISBN: 9789681683986
Si a las palabras que la gente pronuncia se las lleva el viento, a las que están impresas en papel se las lleva el fuego. O el agua, o los insectos, o las bombas, o la mera negligencia, o el violento odio de un conquistador que pretende borrar el pasado. En la obra que el lector tiene en las manos se revisa la aterradora y frecuente práctica de destrucción de libros, en ocasiones como consecuencia de una invasión o una venganza, en otras como resultado de un accidente, en algunas más como un símbolo, pues muchas hogueras de libros en realidad buscaban aniquilar a sus autores.
Dejando de lado la indignación que el tema provoca, aunque sin escatimar calificativos cargados de ironía, Lucien X. Polastron recorre diversas geografías y épocas -desde los depósitos de arcilla con escritura cuneiforme hasta el saqueo en la Bagdad ocupada por el ejército estadounidense- para enfrentarnos con la nefasta vocación de los hombres que pretenden silenciar las obras que hablan con sus lectores desde el papel. Así, se exponen temas como:
– la era del papiro, cuando florecieron Egipto, Grecia, Roma y Constantinopla;
– el islam, tanto en medio oriente y África como en Europa;
– la gente del libro: el pueblo judío y la persecución bibliográfica a la que se le ha sometido;
– los reinos asiáticos del bambú, la meditación y el pincel: China, India y Japón.
– el occidente cristiano, de la edad media a la era moderna, pasando por la voraz Inquisición;
– los nuevos biblioclastas: la Alemania nazi, la Rusia estalinista, los convulsos Balcanes, entre otros;
– las tragedias en tiempos de paz, cuando la naturaleza, el mar, el robo o la muerte cercenan a los acervos bibliográficos;
– el desmantelamiento contemporáneo de bibliotecas;
– las opiniones o ficciones de autores célebres acerca del peligro -o la necesidad- de destruir todos los libros.
Esta historia de la interminable destrucción de bibliotecas es un modesto homenaje a los millones de obras desaparecidas y una advertencia para que hagamos de la preservación bibliográfica -tanto en lo personal como a escala mundial- un compromiso imporstergable. Y además es, como una imagen en negativo, la crónica del insaciable anhelo humano de reunir todos los libros bajo un mismo techo.