Primeras reacciones chinas al cristianismo

ISBN: 9789681628499

La historia del cristianismo en China ha sido tema de numerosos estudios; no así las reacciones de ese país a la conversión a la que, desde alrededor de 1600, intentaron someterlo algunos misioneros. «Había que satisfacer -escribe Jacques Gernet- una curiosidad legítima, pero asimismo tratar de dar respuesta a una pregunta: ¿en qué medida las reacciones de los chinos, durante sus primeros contactos con la ‘doctrina del Señor del Cielo’ -mientras el debate permanece abierto y no se ha caído todavía el estereotipo-, pueden revelarnos las diferencias fundamentales que enfrentan las concepciones china y occidental del hombre y del mundo?»
La actitud de los chinos ante los escritos y los propósitos de los misioneros permite apreciar lo que, en circunstancias ordinarias, no se advierte; arroja también luz sobre la originalidad de las tradiciones chinas respecto de las nuestras. Efectuar su examen es, así, poner de manifiesto otro tipo de dispositivo que excluye la oposición entre lo racional y lo sensible, y la separación de lo espiritual y lo temporal. De aquí se derivan otras concepciones del hombre y del universo, otra moral, otras relaciones entre lo religioso y lo político, otra manera de filosofar. Lo que para nuestra mentalidad es algo anómalo se presenta dueño de una lógica impecable: la unidad del hombre y el universo, la idea de una organización inherente a la ‘materia’ y una especie de metabolismo universal. Esta coherencia de pensamiento hace resaltar -mediante contraste- el carácter de los esquemas mentales que han predominado en Occidente.